miércoles, octubre 18, 2006

LA PERRITA TIENE HIJOS



En un día soleado, había una Perrita, iba a tener cachorritos. Estaba ansiosa por tenerlos a todos cuando nacieron, eran diez, Beto, María, Ron, Kira, Carlos, Tamara, Javier, Javiera, Benjamín y Natalia... esos eran los hijos que tuvo la Perrita... pero la Perrita no sabía que el lobo se comía a los bebes, entonces corrió con todos sus hijos y se los llevó a una cueva y los dejó ahí y después salió y el lobo la rasguñó... lo mataron y a ella la llevaron al hospital y se mejoró y fue a donde estaban sus hijos y les dió un abrazo.

FIN

Para Mamá. TE AMO

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde el cielo bajaron angelitos,
que nos tían alegrias
esta tierra feliz sería
con agelitos tan bonitos

En un reino de obscuridad
habia un rey sin sueños
de esa soledad era dueño
donde no habia felicidad.

De repente, entre estrellas
aparecio un angelita
que no venia solita,
y era muy bella

Eres un ser de quien uno se enamora
que solo duran un instante
y ese angelito tan brillante
eras tu, mi hermosa Isadora.

GAS

Anónimo dijo...

Ocurrió que una joven princesa del reino de donde quiera que sea, pidió le hicieran un regalo muy grande y uno muy pequeño, pero que no se pudiera medir su precio en oro, en plata o simple dinero. El Rey y la Reina que en todo la consentían, decidieron buscar regalos para cumplirle el deseo. Así comenzó a pasar el tiempo y muchos magos, aprendices de hechiceros y hasta charlatanes se pasearon ante los monarcas con inventos y soluciones al problema que tenían. Pero nadie atinaba a descubrir algo que les contentara, pues siempre llegaban al momento en que al preguntar; ¿Cuanto cuesta? Encontraban por respuesta algún montón de dinero, monedas o especias, según fuera la procedencia. Así fue como un andrajoso pordiosero pidió ser escuchado por los Reyes, los guardias y los consejeros se rieron de él, pero tal fue su insistencia que terminaron por acceder a sus reclamos. Cuando estuvo en presencia de los Reyes, el pordiosero les hablo con voz lenta pero muy clara:
¡Solo diré a la Princesa los regalos que ustedes le han enviado, pues tengo la certeza de que su gusto serán mis recados!

Como tanto tiempo y pesares habían tenido en busca del regalo requerido, sin importar mucho el resultado, decidieron que este sucio vagabundo, sería bien venido, "¡eso si!" dijeron con gran tono, "sólo accederemos si te lavas un poco y recortas el moño". Pensó, el enjuto busca vidas y accedió sin mucho reclamo, le llevaron a la cocina, comió a sus anchas y en bañera de plata y oro se limpio la mugre del camino andado. Ya pasada la tarde y cuando el sol casi caía, pidió ser llevado ante la niña a quien su regalo entregaría.
Cuando estuvieron frente a frente ella lo miro indiferente, él se acerco y pidiendo permiso, en el oído por un breve momento unas palabras dijo… luego mientras salía vio brillar los ojos de la Princesa y desde un rincón tras la cortina los padres de ella se asomaron, “¡muchas gracias!” dijo la niña, “¡por enviarme tan buen regalo y sobre todo por cumplir, la condición que tan difícil solución les ha costado!”. Se apresuraba a ir a su salón de juegos cuando los desconcertados padres le pidieron repitiera para ellos el regalo concedido. Entonces la niña dijo, “sobre este mundo no hay regalo sin precio mas grande que un hijo tenga vida gracias a sus Padres y aunque están en todas partes y las usan ricos y pobres, hombres y mujeres, niños y ancianos, la cosa mas pequeña y de mayor valor incalculable, son las palabras pues con ellas vamos libres desde donde estemos a cualquier parte!.

Unos dicen Colorin, colorado, otros hablan del zapato roto, como yo no soy pájaro, tampoco avión, ni siquiera un hechicero, sólo digo que tu cuento, es como una canción, donde cantas las notas dulces que te salen del corazón.